Errores que debes evitar al encargar una traducción jurada

Encargar una traducción jurada en Tradutema es un paso esencial cuando necesitas que tus documentos tengan validez legal ante instituciones oficiales. Sin embargo, muchas personas cometen errores comunes durante este proceso que pueden retrasar trámites importantes o incluso invalidar completamente la traducción. Evitar estos fallos no solo garantiza un servicio de calidad, sino que también te ahorra tiempo, dinero y complicaciones innecesarias.

Confiar en traductores no acreditados

Uno de los errores más frecuentes es confiar en traductores que no están oficialmente habilitados para realizar traducciones juradas. En España, por ejemplo, solo los traductores nombrados por el Ministerio de Asuntos Exteriores pueden emitir traducciones juradas válidas. Recurrir a un profesional no autorizado puede parecer una opción más económica, pero los documentos traducidos no serán aceptados por organismos oficiales, lo que implica tener que repetir todo el proceso desde cero.

Plataformas especializadas como Tradutema garantizan que cada traducción jurada sea realizada por un traductor acreditado, lo que ofrece seguridad jurídica al cliente desde el primer momento.

No revisar el documento original antes de enviarlo

Aunque parezca evidente, muchas personas envían documentos incompletos, escaneos de mala calidad o versiones obsoletas de sus textos. Esto no solo retrasa la traducción, sino que puede generar errores en el contenido final. Asegúrate de revisar que el documento esté actualizado, completo y correctamente escaneado o fotografiado antes de enviarlo. Cuanto más clara sea la información original, mejor será el resultado de la traducción.

Asumir que los plazos son inmediatos

Otro error común es pensar que una traducción jurada puede entregarse en cuestión de horas. Aunque algunas agencias pueden ofrecer servicios urgentes, lo habitual es que una traducción de calidad requiera al menos uno o dos días hábiles, dependiendo del volumen de texto. Además, si se trata de varios documentos o de contenido técnico, el proceso puede llevar más tiempo.

No dejes este trámite para última hora. Planifica con antelación y consulta los plazos estimados con el proveedor de servicios, especialmente si necesitas la traducción para presentar documentos ante un organismo público o una universidad.

No preguntar por el formato de entrega

Una traducción jurada tiene requisitos específicos en cuanto a su presentación: debe ir firmada y sellada por el traductor, e incluir una declaración oficial que certifique su fidelidad al original. Algunas personas cometen el error de asumir que recibirán el documento solo en PDF, cuando en realidad muchas instituciones exigen el original en papel.

Consulta con el traductor o la agencia si el envío se hará por correo postal, si se requiere copia impresa o si es posible obtener una versión con firma digital, muy útil en trámites online.

Olvidar especificar el idioma exacto o el país de destino

Aunque parezca un detalle menor, no es lo mismo traducir un documento al inglés para uso en el Reino Unido que hacerlo para los Estados Unidos. Las diferencias lingüísticas y legales pueden ser significativas. Si el documento será presentado ante una institución específica, informa al traductor sobre el país de destino para asegurar que la traducción cumpla con los estándares locales.

Pensar que todas las agencias ofrecen el mismo servicio

La calidad del servicio puede variar mucho entre distintas agencias o plataformas. Algunas tienen experiencia específica en documentos académicos, otras en temas legales o médicos. Optar por una agencia especializada como Tradutema garantiza no solo una correcta traducción jurada en Tradutema, sino también asesoramiento personalizado, cumplimiento de plazos y atención al detalle, lo cual marca una gran diferencia en el resultado final.

No conservar una copia de la traducción original

Una vez recibida la traducción jurada, muchas personas no conservan una copia digital o impresa. Esto puede ser problemático si más adelante necesitan presentar el mismo documento en otra institución. Siempre es recomendable guardar tanto el original como la traducción certificada, ya que volver a solicitarla implica un nuevo coste y tiempo de espera.

La importancia de hacer las cosas bien desde el inicio

Encargar una traducción jurada es más que simplemente traducir un texto. Es un proceso legal, técnico y formal que requiere precisión, profesionalidad y cumplimiento de normas específicas. Elegir un proveedor fiable, revisar el documento original, ser claro en los requisitos y tener expectativas realistas sobre los plazos son pasos clave para evitar errores que pueden salir caros.

Ser consciente de estos fallos comunes te ayudará a gestionar mejor tus trámites y a obtener un servicio eficiente, válido y de calidad. La traducción jurada es una herramienta clave en muchos procesos legales y administrativos, y hacerla bien desde el principio es, sin duda, la mejor decisión.


Autor: Jesús Barreña | Artículos - Linkedin de Jesús Barreña - Twitter
Planificación de finanzas personales / inversión en fondos de inversión indexados / inversión en inmuebles con poco dinero.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies
Scroll al inicio